El Coravín, un artilugio curioso

Hoy os traemos un gadget muy interesante. Su nombre es Coravín y es un artilugio que nos permite extraer la cantidad deseada de vino de una botella sin abrirla, evitando así que se nos estropee o pierda sus cualidades.

Esta pensado para usuarios, que de vez en cuando, desean disfrutar de una copa de ese gran vino que tienen guardado solo para días especiales. En hostelería es usado para aquellos vinos caros, de los que solo se necesita extraer una o dos copas puntualmente. También se utiliza para sacar muestras de vinos antiguos.

Su funcionamiento es muy sencillo. El sistema inserta una aguja de acero inoxidable recubierta de teflón de un diámetro muy reducido a través del corcho. Una vez dentro, se inserta en su interior un gas noble, presurizando el vino. Una vez terminado, se extrae la aguja y la botella continua cerrada sin que se altere su contenido.

Existen dos tipos de aguja distintas. Una sería la Aguja de Añada (o Vintage), que es más delgada que la aguja estándar y está diseñada para aquellas botellas más antiguas cuyo corcho pueda estar más dañado por el paso del tiempo. Con este sistema se facilita la cata en pequeñas dosis, con la certeza que el caldo mantiene todas sus cualidades y sabor.

La otra aguja es la de escanciado rápido. Una aguja más más ancha, que permite escanciar un vaso de vino con mayor rapidez. Nos permite así disfrutar del vino sellado con su corcho sin tener que consumir toda la botella, lo que nos permite disfrutarlo en pequeñas cantidades.

A continuación os dejamos un video demostrativo de como funciona.

El Coravín puede adquirirse fácilmente en establecimientos especializados o a través de internet. Su precio ronda los 200€ mientras que las cargas de gas Argón cuestan alrededor de 20€.